Raquel, ya hacia días que venia por nuestro refugio, estaba indecisa pensando cuál de los cachorros adoptaba, son todos una preciosidad y la decisión a veces se hace un poco dificil, le encanto los de Alamus, aquellos que tiraron dentro de un contenedor de basura, y por fín decidió quedarse a Tango, uno de color blanco y marron, juguetón y muy cariñoso, Raquel muy contenta, se fue con tango, y desde aquí les damos las gracias por adoptar a un abandonado.
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