CATALUÑA ya tiene TORTURA CON BARRETINA
CATALUÑA ya tiene TORTURA CON BARRETINA, con toros enmaromados (capllaçats), toros de fuego (embolats), toros al mar, etc. Se han BLINDADO estas atrocidades defendidas por unos políticos que hipócritamente prohibieron las corridas de toros en Catalunya.
El Parlament aprobó la ley de las atrocidades hacia los toros catalanes con 114 votos favorables, 14 en contra y 5 abstenciones, defendida como tradición en las Tierras del Ebro, (sur de la provincia de Tarragona). Y eso ha ocurrido dos meses después de presumir de civismo prohibiendo las corridas de toros en la única plaza agonizante (sin afición) que quedaba en Catalunya por falta de tradición. De la manera más farsante los políticos han hecho su “faena”, han “toreado” a la sociedad catalana engañando a unos y pactando con otros, buscando el único fin electoral a pesar de sus contradicciones e incoherencias, sin preocuparles en absoluto el sufrimiento animal.
El argumento consensuado de estos representantes de Catalunya (sin tener en cuenta que más del 80% de la población quiere la prohibición de los correbous), defiende que a los toros de tradición en el sud de esta Comunidad no se les da muerte, aunque se maten sin presencia de público para hacer el estofado de las comilonas pueblerinas que hermanan a los torturadores después de sus dantescas fiestas mayores.
En los correbous, muchos de los toros padecen tanto que se ha llegado a desear la muerte del toro para que dejara de sufrir tanta crueldad y agonía,… de hecho muchos de estos toros mueren súbitamente.
En los enmaromados o ensogados, los toros sufren vejaciones, burlas, tirones de cola, lanzas eléctricas, y múltiples golpes para que recorran forzosamente las calles del pueblo, tropezando contra mobiliario público, contra coches, lastimándose, sangrando, babeando, bramando, con roturas de cuernos, de patas, defecando y orinando entre voceríos de los pueblerinos.
En los toros de fuego el animal sufre tanto como el enmaromado añadiéndose el dolor de las quemaduras y pánico natural al propio fuego, también les colocan en sus cuernos los fuegos artificiales horrorizándoles aún más.
Durante años ACTYMA ha visto archivar múltiples denuncias y recursos contra estos festejos, habiéndose cometido infracciones graves llegando incluso a la muerte del Toro. Las denuncias siempre se han acompañado de material gráfico probando los hechos, pero jamás desde la Administración politizada por los votos, o favoritismos, se ha sancionado ningún espectáculo, incurriendo algunos en presunta falsedad documental.
Todo ello supone un presunto negocio, pues estas peñas taurinas, con el dinero del municipio, compran toros para martirizar, humillar, y matar; luego con la venda de la carne se paga a los “bufones” que entretienen al público embolando, ensogando, ofreciendo espectáculos de recortes, carrerillas, esquives, lanzándolos al mar, mientras el público espera ver una cogida, caída, o demás sensaciones de muerte,… atrocidades ancladas siglos atrás y totalmente anacrónicas. He aquí la crispación de unos cuantos cuando se toca este tema (los ganaderos, peñistas, aficionados y demás)…
Saludos,
Lluís Altes Vendrell
Vicepresidente
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ACTYMA - ASOCIACIÓN CONTRA LA TORTURA Y EL MALTRATO ANIMAL
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