CARTA DE LA LYDIA A LA PREMSA

CARTA PUBLICADA A LA PREMSA, EL DIUMENGE 10 D'AGOST:

Escribo en castellano, para que todo el mundo, pueda leer y entender, lo que en dicha carta se hacía constar.
La escribió mi marido, y esto sí que puedo decirlo y bien alto, no con ánimo de hacer daño a las pobres criaturas de 4 patas, esta nunca fue la intención, ni mucho menos.
Tanto mi marido como yo, llevamos 25 años batallando por ellos, hemos visto de todos los colores, y con finales fatales, desde nuestra lucha contra las peleas de perros, persiguiendo a los causantes con nuestro vehículo, en campo abierto, arriesgando nuestras vidas. Desde el atentado que sufrimos, que salió en la prensa, con magulladuras por todo el cuerpo, una voluntaria con la cabeza abierta, y yo misma, con más de 15 golpes hechos con un bastón de grandes dimensiones, todo en defensa de nuestros animales. Desde la lucha, encarnizada con el Ayuntamiento, porque querían cerrar la protectora y querían matar a nuestros perros, de esto hace unos 12 años, bueno, que más os podría decir.
Mi marido siempre estuvo y está a mi lado, con nuestros bebés, como yo digo. Defediendo y poniendo su vida, para el bienestar de ellos.
Y cuantas cosas os podría contar más, marido como él, yo creo que no hay en el mundo, hombre que ha puesto 25 años de su vida para ellos, me ha visto llorar de impotencia, ha estado a mi lado en los momentos difíciles, me ha apoyado, cuando un perro ha estado enfermo y no lo hemos podido salvar, no ha hecho vacaciones durante estos 25 años, no salimos ni a restaurantes, ni a ningún sitio, sólo puntualmente y por obligación, ha dado su vida por ellos, y nunca, nunca, he oído de su boca un quejido de dolor por no poder llevar una vida, como casi todo el mundo lleva, salir, vacaciones, divertirse.
A mi lado vive penas y alegrías, amor demostrado con lo que hace para ellos, como nuevas instalaciones en el recinto, que esto comporta trabajar los días que el tiene fiesta en su trabajo. ¿Qué más os voy a decir?, ¿vuestro marido es cómo él?
Lamentablemente, mucha gente puede ver la botella medio llena, o medio vacía, depende con que ojos se mire. Con la carta que escribió mi marido, no tenía la intención de hacer daño a nadie, y menos a nuestros animalitos. Esto queda demonstrado.
Hace ya 10 años, vivimos un holocausto en la protectora amics del Segrià, que conllevó un cambio de junta, personas no cualificadas para este menester, ya que no sabían ni lo que eran los perros. Sufrimos muchísimo, ya que tuvimos que marcharnos a la fuerza, nos dieron una patada en el culo, y aquí se acaba todo. Los socios desesperadamente me llamaban diciendo lo que estaba pasando. Perros en el suelo hechos un cadáver, unos comidos por falta de comida, bueno, que voy a contaros, claro que lo voy a contar, pero en mi biografía, que pronto va a salir, levantamos 5 actas, sí señores. Y no nos hiceron caso. Delante de los mosos de escuadra, encontramos un bidón industrial, lleno de cadáveres asesinados. Puedo contaros más…. Y más….
Por esto que nos ocurrió, mi marido quiso dar la mano a la PROTECTORA AMICS DELS ANIMALS DEL SEGRIA. Para que no volviera ocurrir otro holocausto, dándoles la ayuda necesaria, pero ellos, no nos informaron de nada, nada. Y nuestro padecimiento fue creciendo. ¿Qué habríais hecho en nuestro lugar con todo lo que nosotros vivimos?. No quería culpar a nadie, solo decirles que si necesitavan nuestro apoyo, allí estábamos, pero nada de nada….
Por este motivo, mi marido escribió esta carta, no para ofender a nadie, ni pedir presupuesto a nadie, solamente para darles el apoyo y hacer un poco de fuerza delante del Ayuntamiento.
Siento mucho que se haya malinterpretado dicha carta, y como podéis observar, hay que saber todo antes de juzgar a alguien.
Otra cosa, nuestra protectora está ubicada en nuestro terreno, en nuestra casa, supongo que con esto ya digo todo, ¿no?
Gracias a la gente que ha comprendido el contenido de la carta, y siento mucho, los que han visto una carta incendiaria, ni mucho menos es así.
Lydia argilés